Cómo usar homeopatía para los animales
La disputa sobre la efectividad de la homeopatía existe desde su creación misma. Lo que es seguro es que esta forma de medicina alternativa ya ha ayudado a miles de personas con muy distintos trastornos de salud, y está de hecho ganando terreno. Nuestra civilización moderna ya no podría prescindir de la homeopatía, que también puede utilizarse en animales.
Samuel Hahnemann, el fundador de la homeopatía moderna, estaba convencido de que un animal enfermo podía ser curado utilizando su medicina natural tan eficazmente como un enfermo.
La homeopatía, eficaz también en animales
La mayoría de los problemas de salud se deben debidos a factores ambientales tales como las emisiones de contaminantes (dióxido de carbono, monóxido de carbono), la contaminación electromagnética (antenas), toxinas en el interior de las viviendas (hongos, humedad) y el ruido. Las enfermedades crónicas también pueden estar originadas por nuestro régimen alimentario excesivamente rico, mientras que la malnutrición ocasionará molestias de estómago, deficiencias nutricionales y facilitará la aparición de cánceres. Otros tipos de dolencias son las enfermedades estacionales, las enfermedades agudas como el catarro y la tos y los trastornos como las depresiones, que afectan cada vez más a jóvenes y hasta a niños. Sobre todo en el caso de las enfermedades crónicas (pero no sólo), muchas personas han encontrado en la homeopatía un medio para aliviar sus males y superar su dolencia.
Al igual que los humanos, nuestros amigos los animales pueden caer enfermos y por las mismas causas. Y aunque la medicina moderna es indispensable en muchas situaciones, los dueños de mascotas con enfermedades crónicas o afectados por alguno de los numerosos pequeños trastornos de la salud que son tan corrientes podrán recurrir con toda confianza a remedios homeopáticos. La ventaja de estos medicamentos es que son menos agresivos para la salud (tanto para los humanos como para los animales), y carecen de los efectos no deseados de los medicamentos convencionales.
Según la doctrina de Hahnemann, la homeopatía utiliza para realizar los remedios sustancias que, en un individuo sano, causarían efectos similares a los de los síntomas de la enfermedad a tratar. Este principio de similitud sigue el dogma “Similia similibus curantur”: “lo semejante cura a lo semejante”. Las sustancias naturales de la homeopatía despiertan determinadas zonas en el cuerpo humano de manera suave, permitiendo así el alivio del paciente.
Particularidades de la homeopatía animal
Todos los seres vivos compartimos el mismo mundo. Efectivamente, nuestros amigos animales están expuestos a las mismas influencias que los seres humanos. Como nosotros, pueden caer enfermos y sufrir dolores agudos o crónicos.
En general, la homeopatía para los animales sigue las mismas normas que la homeopatía humana. La farmacopea homeopática de Hahnemann, sus patogenesias (“materia medica”) con su índice, se recoge tal cual. Por supuesto, la curación no puede provenir únicamente de la utilización de medicamentos homeopáticos. Como para la homeopatía humana, un enfoque holístico es primordial. Como los animales obviamente no hablan, no están en condiciones de decir lo que causa sus dolores. Por ello, su propietario desempeña un papel muy importante en el correcto tratamiento del animal.
Un elemento central de la homeopatía veterinaria es la psicología animal, lo cual incluye la relación entre la macota y el propietario. La información facilitada por este último será entonces de la mayor importancia para ayudar al veterinario a establecer un diagnóstico. Por consiguiente, esta información debe ser interpretada de la manera más objetiva posible.
La homeopatía para animales en la práctica
El mayor deseo de todo propietario de un animal de compañía es que éste se encuentre en buena salud, que esté y equilibrado. Lamentablemente, nuestros amigos cuadrúpedos pueden caer enfermos o lastimarse. Por ende, los incondicionales de la homeopatía propietarios de un animal de compañía aprecian al veterinario homeópata por los beneficios que produce en los animales. Por ello mismo, son cada vez más las personas que saben o quieren saber qué debe contener un botiquín homeopático felino y canino (o animal en general).
La artritis en perros puede ser tratada con la homeopatía, lo mismo que la alergia a las pulgas en gatos y la bronquitis en caballos. Por otro lado, si la homeopatía puede ayudar a curar agresividad, ansiedad, celos, inflamaciones, diarrea, problemas de la piel y trastornos neurológicos en animales, es porque responden bien a los tratamientos homeopáticos. Además, el efecto placebo, tal como se conoce en el ser humano, no existe en el mundo animal. Los medicamentos homeopáticos utilizados en el tratamiento de los animales muestran resultados excelentes. En efecto, no hay nada que perturbe la transposición del uso de remedios de la homeopatía clásica a la homeopatía veterinaria.
La utilización de la homeopatía para tratar enfermedades implica una ventaja importante: su carácter absolutamente inofensivo y su ausencia de efectos secundarios, y ello tanto para las personas como para los animales. Además, los gránulos y diluciones homeopáticas son bastante fáciles de manipular y administrar, ya que basta con mezclarlos a los alimentos o diluirlos con agua. Esto evita dificultades al propietario de un animal de compañía en el momento de administrar el tratamiento prescrito a su mascota.
Consulte a su veterinario para saber si su animal de compañía puede ser tratado con la homeopatía. Con frecuencia, es posible reemplazar un tratamiento médico tradicional.